7 Cosas para liberar tu mente
7 Cosas que puedes hacer para liberar tu mente
Hay días que no te aguantas ni tú misma.
Y no solo porque estés enfadada o frustrada sino porque no entiendes qué es lo que te tiene realmente en esa sensación.
Estamos acostumbrados a querer, o tener que, guardar nuestras emociones, esconderlas; porque reaccionar no está bien.
Lo que no acabamos de entender es que las emociones están ahí y no podemos ocultarlas por más que queramos o nos digan.
Cuando nos empeñamos en «no sentir» lo único que provocamos es caminar por la vida con una carga emocional que no nos deja en paz.
A mí me pasa y estoy segura que a ti también; vives pensando que sentir o reaccionar no está bien visto.
Por otro lado creyendo, que la lucha que libras en tu interior es solo tuya, que eres la única que se siente así, parece que el resto de los mortales lo lleva bien; así que la que está mal eres tú.
Pues no, no somos las únicas
Habemos muchas mujeres, me incluyo por supuesto; y muchos hombres, (también, estoy segura) intentado encontrar una forma de lidiar con las emociones.
La mejor manera de lidiar con ellas es aceptándolas.
Pasamos tanto tiempo intentando esconderlas que, además de la lucha, en el momento en que salen, nuestras reacciones parecen fuera de control.
Lo primero que tenemos que hacer es identificar cuáles son esas emociones.
Emociones básicas
- Miedo: Pertenece al grupo de las reflexivas y se conoce como de «repliegue».
Su función es advertirnos sobre el peligro, ya sea que lo recibamos o lo causemos.
La manera más fácil de «controlar» el miedo es conociendo las situaciones a las que nos vamos a enfrentar para saber qué tanto riesgo hay.
2. Tristeza: También pertenece al grupo de las reflexivas y es conocida como la de mayor «repliegue».
Su función es hacernos conscientes de cosas, personas o situaciones que perdimos o extrañamos.
Nos permite también soltar lo que nos hace daño.
3. Alegría: Conocida como la emoción de la «apertura» y pertenece al grupo de las expansivas.
Si función es la de crear vínculos con los demás.
Así como la de hacernos conscientes de las cosas que nos hacen sentir plenos, en paz y serenidad.
4. Ira: Pertenece también al grupo de las expansivas.
Suele aparecer cuando situaciones o personas rebasan nuestros límites.
Después existen 4 emociones secundarias (en algunos casos las consideran básicas, en otros las dividen en primarias y secundarias).
Estas son: Vergüenza, Amor, Sorpresa y Aversión; en sí están relacionadas con las cuatro básicas.
Una vez que las identificamos y entendemos para qué están en nosotros, es más fácil lidiar con ellas y aprender a manejarlas; no a controlarlas.
7 Cosas que puedes hacer para liberar tu mente
1. Meditar
Sí, ya sé lo que me vas a decir, que no tienes tiempo, que no sabes cómo hacerlo, que eso de poner la mente en blanco y no pensar en nada es casi imposible.
Lo sé porque yo pensaba lo mismo y obviamente no te voy a dar una cátedra de meditación, pero lo que sí te puedo decir es que, para mí, meditar no es solo eso o (si lo quieres ver así) es mucho menos que eso.
Es tomarte unos minutos en total calma y silencio, tratar de solo escuchar; escucharás a tu cabeza dando vueltas a los problemas y preocupaciones; pero también te llegarán pensamientos y sensaciones que en el día a día no notas.
Date la oportunidad y me cuentas, yo empecé a meditar levantándome quince minutos antes de lo acostumbrado y tomándome una taza de café.
2. Leer
El pretexto del tiempo no entra aquí.
No necesitas leer el Quijote en una sentada, puedes leer cualquier cosa que te interese en cualquier dispositivo o papel mientras esperas por los enanos a la salida del cole.
O diez minutos antes de dormir. La idea es que tu mente se concentre en otra cosa, en otra historia que no sea la tuya.
3. Yoga
Vuelvo a decirte lo mismo de antes, no necesitas una hora de yoga. Con unos minutos que dediques en la mañana para hacer un poco te servirá para conectar con tu cuerpo de una manera diferente y lo encontrarás muy revelador sobre tu cuerpo físico.
El yoga es más que pararte de cabeza o hacer contorsiones extrañas (así nos parece cuando lo vemos o queremos empezar).
4. Caminar
Darte unos minutos para conectar con la naturaleza, no necesitas un lugar especial para hacerlo ni demasiado tiempo.
Solo es cuestión de caminar un poco y mientras lo haces enfocarte en todo lo que te rodea, salir de la situación en la que estés y poner atención en otras cosas.
La naturaleza es maravillosa si se le presta verdadera atención.
5. Pintar/ Dibujar
No necesitas ser un artista o crear la obra de arte que el mundo está esperando.
Solo necesitas un papel y un lápiz o colores y darle rienda suelta a tus manos, sin pensar en que tiene que ser perfecto (nadie lo va a ver).
A veces esta puede ser una manera de que nuestras emociones y sentimientos salgan a través del color.
6. Escribir
Llevar un diario es realmente liberador.
No el clásico diario donde cuentas lo que haces o lo que te pasó como si fuera una bitácora.
Lleva un diario de emociones, escribe cómo te sientes, qué te tiene preocupada, molesta, triste y deja que salga todo lo que esa emoción te está provocando.
Si haces esto conseguirás sentirte como si te quitaran un peso de tu espalda.
7. 15 minutos contigo
Dedicarte unos minutos a consentirte y no importa el qué o el cómo.
Puede ser desde programarte una cita para que te den un masaje espectacular hasta darte el lujo de tomarte una ducha larga.
Tú decides, pero es el momento de escucharte y darte esos gustos que, por el corre corre diario, no te das.
Si haces todo esto de corrido, te llevará máximo hora y media de tu día, ese día que tiene veinticuatro horas.
Además de que te puedo asegurar que, como yo, pasas más tiempo que eso en las redes sociales o pajareando por internet.
Ahora bien, si lo haces por separado, es verlo como tomarte unos descansos cada cierto tiempo en tu día.
Y al ser períodos cortos de tiempo casi no notarás que ya lo hiciste.
Empieza por uno a la vez y conviértelo en un hábito, no en una rutina (las rutinas aburren y acabas dejándolas), en cuanto logres ese, vas por el siguiente.
Cuando te des cuenta tendrás estos siete hábitos incorporados y poco a poco te sentirás más liberada y más en control de tus emociones.
Te darás el lujo de sentir, porque te lo mereces, sin la culpa de reaccionar.
Por hoy es todo, pero ya sabes que cualquier cosa,
estaré encantada de leerte en los comentarios y por correo (platicamosrocio@gmail.com).
Si te apetece, comparte y soñemos juntas.